El embarazo es una de las etapas más especiales para cualquier mujer que decida ser madre. Y es que es la evidencia de lo que el cuerpo es capaz de crear, nada más y nada menos que una vida. Para ello, este atraviesa cambios, algunos apreciables y otros no tanto, pero igualmente significativos. Aunque es un momento vital generalmente caracterizado por la ilusión de lo que está por venir, también es habitual experimentar miedos, dudas y una gran incertidumbre. Es normal que surjan cantidad de dudas sobre lo que se debe o no se debe hacer durante los meses de gestación y una de las cuestiones más repetidas es si entrenar fuerza durante el embarazo es recomendable. ¡Te lo contamos!
Lo primero que hay que destacar es que, del mismo modo en que cada mujer es un mundo, cada embarazo también lo es, con unas necesidades y contextos propios. Por ello, aunque la recomendación general es que entrenar la fuerza durante el embarazo es completamente recomendable y beneficioso, deberá ser tu médico quien, conociendo tu caso, te dé luz verde. Hay diferentes factores que pueden connotar a un embarazo como de riesgo y es muy importante seguir las recomendaciones específicas.
Ahora bien, en términos generales entrenar fuerza durante el embarazo es altamente aconsejable por muchos motivos, que influyen sobre la mamá gestante y sobre el bebé que está en camino.
Beneficios de entrenar durante el embarazo
Son muchos y muy amplios los efectos positivos de estar activas y entrenar la fuerza durante el embarazo. Y, ojo, es importante recalcar que no solo durante el embarazo, también antes del deseado positivo y tras la cuarentena en el posparto. Espera, ¡vamos más allá!: el hábito de entrenamiento es importantísimo siempre, así que no lo infravalores porque se traduce en bienestar, salud y calidad de vida.
Dicho esto, una mujer embarazada que entrena está cuidando de sí misma y del proceso de gestación de una forma espectacular:
Beneficios para el bebé
El ejercicio durante el embarazo puede mejorar el desarrollo neurológico y reducir el riesgo de obesidad infantil. Según JAMA Pediatrics (2022), los bebés de mamás activas nacen con un menor porcentaje de grasa corporal.
Mejora la salud cardiovascular
Entrenar fuerza durante el embarazo controla la presión arterial y reduce el riesgo de preeclampsia, un problema frecuente durante el embarazo. En referencia a un estudio publicado en Obstetrics & Gynecology (2019), las mujeres activas tienen un 40 % menos de riesgo de complicaciones cardiovasculares.
Reduce el dolor de espalda
Fortalecer músculos como el core o la zona lumbar disminuye las molestias típicas del embarazo. American College of Obstetricians and Gynecologysts indica en 2020 que el 68 % de mujeres embarazadas reporta menos dolor de espalda con entrenamientos regulares.
Facilita el trabajo de parto
Más fuerza y resistencia significa un mejor manejo del esfuerzo físico durante el parto. El entrenamiento físico reduce en un 30 % la duración del parto activo, según un estudio del Journal of Maternal-Fetal & Neonatal Medicine (2020).
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En conclusión, es sabido por todos que el embarazo trae consigo cambios que, en etapas avanzadas, pueden suponer una alteración importante del día a día tal y como era anteriormente. Hacer lo posible por mantener la actividad diaria, entrenar la fuerza durante el embarazo, apostar por actividades que equilibren los niveles de estrés y ansiedad y compartir las preocupaciones con una red de personas de confianza puede ayudarte mucho a tener un embarazo más saludable y a disfrutar del proceso.
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Recuerda que, si nunca has hecho ejercicio antes, el embarazo no es el mejor momento para hacerlo de forma intensa. Claro que es recomendable también en tu caso, pero escuchando completamente tus necesidades, optando por actividades menos exigentes y manteniéndote activa con opciones complementarias como nadar, caminar, bailar, Pilates o Yoga especial para el embarazo, etc.
¡A por todas!