Damos por hecho que semanalmente cumples con tu rutina de entrenamiento y vas a por todas hacia tus objetivos (y, si no es así, deberías pasear por nuestra plataforma, ¡te enamorarás!). Ahora bien, por más que nos centremos en obtener los resultados físicos deseados a nivel externo, hay algunos conceptos que son los grandes olvidados… La salud y la calidad de vida son los principales favorecidos del ejercicio físico frecuente. Y en este sentido va el tema de hoy… ¿Conoces los beneficios de fortalecer y ejercitar el suelo pélvico? O, empecemos por el principio: ¿sabes qué es el suelo pélvico?, ¿podrías explicarlo? ¡Te ayudamos!
Sabemos que lo más importante es moverse, mantenerse activos e introducir el ejercicio de fuerza en el día a día. Esto favorece enormemente el estado de nuestra salud, tanto a nivel físico como mental. Nos ayuda a prevenir ciertas dolencias y enfermedades, a mantener el estrés a raya y a sentirnos genial con nosotros mismos. Sin embargo, nunca está de más tener ciertos conocimientos más profundos sobre el funcionamiento de nuestro cuerpo y cómo podemos optimizar todavía más nuestra comodidad en el día a día.
En muchas ocasiones, esperamos a sentir una molestia o a experimentar síntomas antes de tomar ciertas medidas. Debes saber que estas deberían ser siempre preventivas en lugar de adquirirse una vez que ha aparecido el problema. En este contexto, hoy queremos hablarte del suelo pélvico: qué es y cuáles son los beneficios de ejercitarlo con el fin de anticiparnos a la aparición de algunos problemas relacionados.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico es un grupo de músculos y tejidos cuya función es sostener los órganos del interior de la pelvis como, en el caso de la mujer, el útero, la vejiga o el recto, con el fin de mantenerlos en su lugar y preservar su adecuado funcionamiento. El suelo pélvico se adapta a nuestros movimientos y cambios de postura, manteniendo la tensión adecuada para que los mencionados órganos permanezcan en su lugar.
Cuando el suelo pélvico se debilita, su estructura desciende, reduciendo su funcionamiento y afectando a la sujeción de los órganos. En consecuencia, se pueden experimentar algunos síntomas como:
- Dificultad para empezar a orinar o vaciar la vejiga por completo.
- Infecciones urinarias habituales.
- Descenso de los órganos.
- Pérdidas de orina al reírse, estornudar, toser o hacer ejercicio.
- Necesidad muy frecuente de orinar.
- Estreñimiento o dificultad para controlar los gases.
- Dolor al orinar.
- Molestias en las relaciones sexuales y con la ejecución de determinados movimientos.
Estas son algunas de las molestias de las muchas que pueden experimentarse cuando el suelo pélvico se daña o se debilita. Las principales razones son el embarazo o el parto, pero también el estreñimiento, la tos crónica o el sobrepeso, entre otras.
Cómo fortalecer y ejercitar el suelo pélvico
La mejor noticia es que, como ocurre con el resto de la musculatura, se puede prevenir la aparición de estos síntomas con la práctica regular de ejercicio físico y los ejercicios centrados en este grupo muscular en concreto. Pero no es todo, trabajando el suelo pélvico se pueden mejorar e incluso revertir por completo algunos de las molestias. Como cualquier músculo del cuerpo, cuando se entrena, se vuelve más eficaz y funciona mejor.
Algunos de los principales beneficios de fortalecer y ejercitar el suelo pélvico son:
- Mejora de las relaciones sexuales.
- Adecuado tránsito intestinal.
- Prevención de la incontinencia urinaria.
- Movimiento cotidiano con una mayor comodidad.
- Mejora de la postura corporal.
- Protección frente a los ejercicios de alto impacto.
- Contribuye a una buena experiencia de parto y recuperación posparto.
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Porque en Entrena Virtual sabemos lo importante que es ejercitar el suelo pélvico y mantenerlo en óptimas condiciones, hemos diseñado un programa especial para fortalecerlo. Aprenderás la importancia del trabajo de esta musculatura y su correcta activación. Se trata de cinco clases de 20-30 minutos de la mano de grandes profesionales que podrás repetir tantas veces como desees. Aprenderás a respirar adecuadamente y a realizar posiciones estáticas para mejorar el tono muscular y evitar lesiones o desequilibrios en el suelo pélvico.
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