Un estilo de vida saludable es ese en el que nos sentimos bien por dentro y por fuera. Tenemos objetivos y sabemos que la paciencia y la determinación serán nuestras aliadas para lograrlos. Tanto en cuestión de alimentación, como en descanso o actividad física, tenemos claro lo que hay que hacer, pero también lo que no hay que hacer. Este aspecto es muy importante para conseguir la evolución deseada y el bienestar asociado a los hábitos saludables. Descubre estos errores en el entrenamiento que debes evitar para disfrutar de una experiencia muy satisfactoria a todos los niveles. ¡Vamos allá!
En cualquier campo asociado al estilo de vida saludable es necesario entender algo: no basta únicamente con introducir nuevas conductas más saludables, desechar aquellas que no lo son o que no reman a favor de los objetivos es igualmente importante. Un ejemplo es que, si introduces alimentos adecuados en tu dieta, pero sigues consumiendo los más perjudiciales, no lograrás la proyección que deseas.
Ahora bien, cada persona es un mundo y en función de cómo sean los hábitos iniciales la transición hacia otros mejores deberá ser más o menos progresiva. Por lo tanto, antes de seguir leyendo, ten claro que hablamos de manera general y que cada caso particular requiere de una actuación específica.
Dicho esto, hoy nos vamos a centrar en los errores en el entrenamiento, que podrían estar haciendo que tu experiencia sea menos positiva, causando alguna incomodidad o ralentizando el desarrollo de tus capacidades.
Errores en el entrenamiento que podrían frenar tu evolución
Presta atención a los siguientes aspectos y, si crees que estás fallando en algo, revísalo para aumentar tu bienestar y, en consecuencia, tu rendimiento:
Calentar vs. Estirar
Tanto calentar como estirar son dos acciones muy importantes en el mundo de la actividad física. Ambas cosas presentan grandes beneficios. Ahora bien, ¿crees que da igual uno que otro para prepararte antes de tu entrenamiento? La respuesta es no, ya que, aunque ambas prácticas son beneficiosas, no son lo mismo.
El calentamiento consiste en ejecutar ciertos movimientos de una forma suave, con el fin de preparar la musculatura para la posterior actividad. Este puede consistir en movilizar el cuerpo de forma controlada, trotar, saltar, etc. Todo dependerá del tipo de entrenamiento que se realizará después, ya que este puede requerir un calentamiento específico u otro. Te adelantamos que el calentamiento, aunque sea breve, es esencial antes de entrenar, sin condiciones ni excusas.
Por otro lado, el estiramiento se enfoca en extender los músculos para mejorar la flexibilidad y reducir el riesgo de lesiones, mejorar la postura corporal, aumentar la funcionalidad y vivir con una mayor comodidad el día a día. Como ves, también es una práctica muy necesaria e importante; no obstante, ¿tiene sentido hacerlo antes del entrenamiento?
Nuestro consejo es que siempre calientes antes de entrenar y reserves la sesión de estiramientos para hacerla de manera aislada o incluso después de la sesión de entrenamiento, cuando la musculatura está más caliente y flexible. Por su parte, el calentamiento preparará tu cuerpo para el esfuerzo, así que debe estar siempre presente.
Plan de entrenamiento: ¿sí o no?
Rotundamente sí. Tener un objetivo y entrenar de manera equilibrada y planeada es esencial. Esto no quiere decir que debas tener una tabla especificada al detalle con los ejercicios exactos, sin dejar lugar a la improvisación de vez en cuando. Más bien significa que seguir una progresión y un orden en los entrenamientos por grupos musculares es importante. Y no solo para lograr ciertos resultados físicos de manera armónica, sino para evitar sobrecargar alguna zona o dejar alguna otra sin fortalecer; lo cual podría ocasionar riesgo de lesiones, entre otras consecuencias.
Por otro lado, disponer de una rutina marcada va a contribuir a una mayor motivación y rendimiento a largo plazo. Entrena con conciencia, sentido y propósito.
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Comer o beber demasiado antes de la sesión
Hay que alimentarse adecuadamente para estar enérgicos y preparados para la acción. Sin embargo, ¿es necesario comer y beber en exceso antes de la sesión? Evidentemente no. Entrenar durante el proceso de digestión puede hacer que suframos molestias durante la actividad, reduciendo nuestro rendimiento, provocándonos malestar y entorpeciendo nuestro desarrollo y motivación.
Hidratarse es muy importante, antes, durante y después de la sesión; pero te recomendamos que durante el entrenamiento lo hagas dando pequeños sorbos. Por otra parte, tienes multitud de recetas deliciosas y saludables en la plataforma, que te mantendrán enérgico, saciado y fit.
